Pensamientos #Santo Rosario

"Y Jesús les dice: ¿Qué teméis, hombres de poca fe? Y levantándose al punto, mandó a los vientos y a la mar, y se siguió una grande bonanza." San Mateo VIII, 26.

Necio, esta noche te vuelven a pedir el alma, lo que has allegado, ¿para quién será?

Dos amores construyeron dos ciudades: el amor propio hasta el desprecio a Dios hizo la ciudad terrena; el amor de Dios hasta el desprecio de sí mismo, la ciudad del cielo.

"Así también vosotros consideraos, que estáis de cierto muertos al pecado, pero vivimos para Dios en nuestro Señor Jesucristo." Romanos VI, 11.

El pecado enferma el alma, disminuye las energías de la persona en su conjunto, por lo regular, es en detrimento de sus finanzas, y poco a poco va provocando un vacío existencial.

"Por tanto, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer: si tiene sed, dale de beber: porque si esto hicieres, carbones encendidos amontonarás sobre su cabeza. No te dejes vencer de lo malo: mas vence el mal con el bien."

Porque nosotros no tenemos que luchar contra la carne, y la sangre: sino contra los principados, y potestades, contra los gobernadores de estas tinieblas del mundo, contra los espíritus de maldad en los aires.

"Y así, mirad, hermanos, que andéis con gran circunspección, no como necios, sino como prudentes: recobrando en cierto modo, el tiempo perdido". Efesios V 15.

"Y por cuanto vosotros sois hijos, envió Dios a vuestros corazones el espíritu de su hijo, el cual nos hace exclamar: Abba, esto es, Padre mío. Y así, ninguno de vosotros es ya siervo, sino hijo. Y siendo hijo, es también heredero de Dios." Gálatas IV, 6.